jueves, 30 de abril de 2015

Javier Olmeda/ CV.Su etapa en Escuela Superior de Música "Reina Sofia" Madrid

Si hace unos días, publiqué "Historias de una historia",con la descripción magnífica que nos hizo Borja, de su etapa como estudiante en Graz, (Austria), quería publicar la de un clarinetista que hubiera estudiado en España, en un centro de tanto prestigio como es el Reina Sofia. Conozco a Javier Olmeda, y a él me dirigí para pedirle que nos contara lo más interesante de sus estudios en el mencionado Centro. Afortunadamente la colaboración de Javier, como en su dia la de Borja,fue muy generosa. Me dijo que sí, y que en unos días tendría en mi correo el CV. y el relato.Así fue, y mi única misión es darle las gracias por su colaboración y publicar el contenido que me mandó:Por lo tanto muchas gracias Javier, y espero que los vídeos que he elegido para publicar sean de tu agrado.
CV.artístico. Javier Olmeda Noguera, clarinetista valenciano, se considera a sí mismo como un músico freelance adaptado a los nuevos tiempos, interesado en la difusión de la música escrita para clarinete, tanto en la música de cámara, como en la de solista. Sin descuidar la vertiente pedagógica e investigadora de la música, compagina su faceta como intérprete, profesor e investigador en el campo de la interpretación. En su actividad profesional colabora con la Orquesta Sinfónica de Madrid (OSM), Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (ORCAM), Banda Municipal de Barcelona, Orchestral Academy del Schleswig-Holstein Festival Orchestra, Orquesta del festival Sommer Oper Bamberg, JORCAM (Joven Orquesta de la Comunidad de Madrid). Trabajando con directores como C. Eschenbach, Manfred Honeck, Mattias Pintcher, Andrés Orozco-Estrada, Tan Dun, Frühbeck de Burgos, Henry Adams, Salvador Brotons, etc... Aparece en diversas salas y festivales del panorama internacional y nacional, tales como el Salzburguer Festspiele, Scheleswig-Holstein Musik Festival, Mid Europe Festival, Spring Festival of Orchestral Music and Arts (Shangai, China), “Veranos de la Villa” (Madrid), Musik und Kongresshalle (Lübeck), Teatro Ribeiro Conceição (Lamego, Portugal), Auditorio Nacional, Auditori de Barcelona, Teatro Real de Madrid, Teatro Monumental, Palau de la Música de Valencia, Teatros del Canal (Madrid), Palau de la Música Catalana, Auditorio de Castellón, etc... Ofrece recitales fuera de España en el ACO-Thormannhalle (Rendsburg, Alemania), y en la residencia cultural "Villa Concordia" (Bamberg, Alemania). A nivel nacional hace conciertos en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Música, Fundación Juan March, Auditorio Sony, II Festival de Clarinete de L'Alcudia (Mallorca), Museo del Diario ABC, Sala de la Muralla de Valencia, Casino Antiguo (Castellón), Capilla de la Sapiencia (Valencia), Fundación Olivar del Castillejo (Madrid). Javier Olmeda Noguera (1987), natural de Valencia, realiza sus estudios musicales en los conservatorios de Valencia, Castellón y la Escuela Superior de Música Reina Sofía. En esta última recibirá clases y consejos del clarinetista internacional Michel Arrignon. Como alumno de la Escuela, forma parte de del Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid,bajo la tutela del Jefe del Departamento de Vientos, H. Schellenberger. También participa en masterclass de Sabine Meyer (Luzerne Festival Orchestra), Eduard Brunner, S. Dohr (Berliner Philarmoniker), Dag Jensen, Ferenc Rados. En el curso 2013-14 es becado por CulturArts para continuar su formación en Madrid, de la mano de Vicente Alberola, clarinetista de reconocido prestigio internacional. Mi etapa en Madrid Hace justo ahora 5 años, en Abril de 2010, me encontraba en la etapa final de mis estudios superiores, cursaba 4º curso de Grado Superior de Música en el Conservatorio Superior de Castellón. Por aquel entonces, mi profesor Santiago Pérez y yo, manteníamos conversaciones de por donde encaminaría mi futuro más cercano, después de 4 años de duro trabajo conmigo, empezamos a ver buenos resultados y fueron estos los que me convencieron de buscar un lugar donde seguir con mi formación como músico e intérprete. Barajaba diferentes opciones, con mucha ilusión y ganas de afrontar una nueva etapa, incluso no me daba miedo salir de España y probar suerte como tantos otros compañeros lo estaban haciendo o pretendían hacerlo. Yo buscaba dos cosas principalmente, primero perfeccionar mis habilidades como músico tanto en el campo de la música de cámara como en el de orquesta, dos ámbitos en los que veía que tenia carencias después de realizar el Grado Superior de música en España; y segundo, lugares con gran cultura musical, donde a la vez de poder estudiar pudiera tener opciones de desarrollar mis habilidades en el ámbito profesional en un futuro. Holanda, Inglaterra, Suiza, o Alemania eran las opciones que tenia en mente donde realizar audiciones a algún conservatorio o academia donde proseguir mi formación con un máster o postgrado. Los consejos de mi profesor eran dos, que me gustase el profesor de clarinete del centro, y como segundo consejo que fuera, si es posible, una capital o ciudad grande, donde hubiera gran oferta de conciertos, orquestas, salas, etc... En ese tiempo, aunque ya había oído hablar de ella, pero no tenia muchos conocimientos sobre que era y como funcionaba exactamente, me informé de la Escuela Superior de Música "Reina Sofia" en Madrid. La Escuela, como todos la llamamos, es un centro privado, de alto rendimiento, en el que se perfecciona a un altísimo nivel la interpretación musical. Profesores de gran prestigio internacional y nacional forman su claustro de profesores. Oferta estudios en diferentes especialidades, enfocadas a todos los instrumentos que forman la orquesta clásica (Viento Madera, Trompa, Cuerda, Canto y Piano). Aparte del instrumento principal tienes una formación complementaria con materias como Análisis, Hª de la música, Ed. Auditiva, Piano, etc...y otros dos pilares muy fuertes, como son las diferentes formaciones orquestales que forman los alumnos (Orquesta Sinfónica, Orquesta de Cámara y Sinfonietta) y el Instituto Internacional de Música de Cámara. Todo ello situado en un marco incomparable, el Madrid de los Austria, la zona centro de la capital de España, a un paso de lugares culturalmente tan emblemáticos como el Teatro Real, Teatro Monumental, Teatro de la Zarzuela, o el Auditorio Nacional, donde poder escuchar orquestas como la ONE, OCRTVE, Orquesta Sinfónica de Madrid, ORCAM y todo tipo de orquestas, grupos de cámara y solistas de talla internacional y nacional que pasaban por allí en sus diferentes giras de conciertos. Poco más que decir, rápidamente que me informe de todo esto, apunte en mi calendario de audiciones a realizar la fecha y los plazos de inscripción, y aun sabiendo que seria difícil allí fui, ese Abril de 2010. Pedían un repertorio exigente, el concierto de Mozart, la Rapsodia de Debussy, la Sonata de Denisow y las Tres piezas de Stravinsky. Lo preparé con gran esfuerzo y constancia durante los dos meses previos, y fui a hacer las pruebas. Con tanta suerte que fui admitido. Después de pensarlo detenidamente, decidí que seria la opción que más me convenía en aquel momento, y no me defraudó. Mi paso por la escuela, fue por dos cursos, desde Septiembre de 2010 a Junio de 2012. Entré a formar parte como alumno de la Cátedra de Clarinete, cuyo profesor titular es el clarinetista francés Michel Arrignon, y su profesor asistente Enrique Pérez Piquer. Dos grandes músicos, excelentes pedagogos y mejores personas. Personalmente tengo que agradecerles mucho a ellos dos, por su gran influencia en mi forma de tocar el clarinete e interpretar la música, especialmente a Enrique. Trabajé duro con el, era exigente, pero su cercanía y su gran experiencia como solista y primer atril de la Orquesta Nacional, influyeron mucho en mi. Mantengo una gran amistad con él y guardo un gran recuerdo de esta etapa con él. La actividad dentro de la escuela fue frenética, el primer curso todo mi tiempo fue absorbido por la actividad diaria de la escuela, clases de clarinete, de música de cámara, asignaturas teóricas, conciertos (dentro y fuera de la escuela), masterclass, ensayos, orquesta y demás actividades llenaban la agenda semanal continuamente. Apenas pude venir a Valencia unas cuantas veces a ver a mi familia en todo el curso. Fue duro, pero en el fondo es lo que quería y estaba cumpliendo mis expectativas. Pude recibir clase tanto de clarinete como de música de cámara de profesores como Eduard Brunner, K.Thunemman, H. Schellenberger, S. Dohr, S. Meyer o D. Jensen, y más profesores del más alto nivel. Hacia de dos a tres conciertos públicos mensuales, preparaba audiciones a festivales, jóvenes orquestas, y formaciones profesionales continuamente. El segundo curso, ya más asentado, viendo la situación con la perspectiva de un año de experiencia, lo disfrute más. Ya no iba tan ajetreado y los proyectos que hice, fueron de un alto nivel y gran exigencia. Especialmente recuerdo dos, un concierto dentro del ciclo de cámara del auditorio de la propia escuela, en el que tocaba el Quinteto para clarinete y cuerdas de W.A Mozart, en la primera parte, y el Octeto para clarinete, trompa, fagot y quinteto de cuerdas de Schubert. Un concierto importante para mi, por la exigencia del repertorio y la responsabilidad que tenía. El otro proyecto, fue un concierto en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional, donde hice un concierto para trío de clarinete, violín y piano, donde interpretamos la versión en trío de la Historia de un Soldado de Stravinsky, y la pieza Contrastes de Bela Bártok. Estaba cumpliendo mis expectativas, interpretar las obras principales del repertorio de música de cámara para clarinete, y ganar experiencia delante del público. También, es verdad, que después de pasar por ahí, hecho en falta que te orienten un poco hacia el ámbito profesional real en el cual nos vemos desembocados todos los jóvenes de mi generación. Deberían de tener un departamento de formación y orientación laboral, o algo por el estilo, donde los alumnos pudieran aprender a como preparar una audición de orquesta, las gestiones administrativas necesarias, como preparar un buen CV o aplicación a una vacante en una orquesta europea, como escribir cartas de motivación, realización de un portafolio de artista, saber configurar un recital atractivo para luego poder ofrecerlo a festivales y salas, etc...la verdad que todo este tipo de cosas uno no las tiene en cuenta mientras esta en esa etapa, pero son realmente útiles y de verdadera necesidad una vez quieres acceder al mundo profesional. Desde mi experiencia, la Escuela Reina Sofia, es una buena opción dentro de nuestro país donde poder realizar estudios de postgrado y complementar la formación que ofrecen los conservatorios superiores nacionales, particularmente lo que más me gusta es la continua exposición al público que tienes como alumno, realizando conciertos de diferente tipo tanto dentro como fuera de la escuela. Desde aquí agradezco el apoyo y consejos que recibí por parte de la escuela, de mis profesores, de mis compañeros y amigos, y en especial de mi familia, con los cuales nada de esto hubiera podido ser. Fueron muchas las experiencias vividas, las cuales cada una aportó un granito de arena a mi formación como clarinetista y como persona. En 1849, al convocarse oposiciones para proveer la plaza de profesor de clarinete del Real Conservatorio de Música y Declamación de Madrid, Carnicer fue el encargado de componer la pieza obligada de examen. El resultado fue esta Fantasía para clarinete obligado con acompañamiento de pianoforte, que sigue el molde habitual de una introducción lenta de carácter rapsódico seguida de un movimiento rápido en forma ternaria reexpositiva. La filiación estética del autor queda patente en el variado material temático, mientras que el destino de la obra condiciona el virtuosismo de la parte solista así como la parquedad del acompañamiento de  piano. Javier Olmeda posee un canal de vídeos al que podéis acceder desde esta url. https://www.youtube.com/user/javierclarinet
Feliz acueducto a tod@s.

martes, 28 de abril de 2015

Handy no escribió el concierto de clarinete.

Tengo la enorme satisfacción de tener entre los habituales del blog a Enrique.Hoy al  abrir el correo y ver que me había escrito sabía que el correo era para aclararme si era o no era el concierto de Handy. Efectivamente. Enrique es un hombre que además de gustarle el clarinete, que está estudiando actualmente, quiere y consigue saber mucho ,muchisimo del instrumento, de la música que se escribió para el mismo, y cómo  además sabe inglés nos ha proporcionado la información que podéis leer. Muchas gracias, porque sin tí este blog, estaría huérfano de asesoramiento. Muchas gracias también a un seguidor que imagino ha escrito los dos comentarios que figuran al pie.
Dice Enrique;
1) Dos de los libros de referencia sobre historia del clarinete ("The Clarinet" de Eric Hoeprich; "The Cambridge Companion to the Clarinet" de Colin Lawson) no lo mencionan. Un tercero ("The Clarinet in the Classical Period"de Albert R. Rice) lo hace para decir que la atribución no se sostiene (ver punto 3.) 2) Dieter Klöcker tenía una pésima reputación entre los musicólogos del siglo XVIII. En palabras de uno de los boletines académicos anglosajones mas difundidos, que habla de otro de los "descubrimientos" de Klöcker, y cito textualmente (traducido del inglés) "Dieter Klöcker es un maravilloso clarinetista, pero sus explicaciones frustrantes e inadecuadas no aclaran ninguna de las cuestiones esenciales... Klöcker es muy aficionado a atribuir obras con exiguas evidencias (como con los tres conciertos para clarinete de Haydn)". 3) La atribución de Klöcker desató una fuerte polémica en su día (hace unos 20 años). Al parecer, nunca dejaba revisar por musicólogos independientes los manuscritos originales que decía había descubierto. En el libro de Rice se cita a uno de los mayores expertos en Haydn, Georg Feder, autor del "The New Grove Haydn", y su negativa a aceptar la autoría después de fracasar en su intento de revisión. Una musicóloga y clarinetista americana, Ellsworth, analizó toda la polémica en el 2002 y llego a la misma conclusión: el título de su artículo fue muy significativo "Los conciertos de clarinete de Haydn: un caso de autoengaño". 4) Desde el punto de vista de un profano (o sea, yo mismo), Klöcker utilizó un "truco algo sucio" para dar verosimilitud ante los legos a las obras: asignarle el número "Hob.VII:deest" es como no decir nada. "Deest" viene del latín "de est", es decir, "no esta"y "Hob.VII" es donde Hoboken, en su catálogo de Haydn, agrupó los conciertos para instrumento solista. Así que "Hob.VII: deest" quiere, literalmente, "no está en el catálogo de Hoboken de conciertos para instrumento solista", lo que es obvio ya que nadie aceptó incluirlos. 5) Hoeprich en su libro menciona que Haydn nunca se sintió cómodo con el clarinete y no lo incorporó en ninguna de sus sinfonías hasta la 99, dos años después de la muerte de Mozart. Quedó bastante contrariado del resultado y luego lo utilizó con mucha cautela, y de forma muy convencional y limitada, en las cuatro siguientes. No es hasta los últimos oratorios, ya casi al final de su vida, ("La Creación" y "Las Estaciones") cuando el clarinete empieza a cobrar cierta relevancia. Con todo esto en la mano creo que, salvo Klöcker, nadie en los ambientes académicos musicales ha reconocido nunca esta obra como genuina de Haydn. Así que es normal que no hayas encontrado nada.

lunes, 27 de abril de 2015

J. Haydn- - Clarinet Concerto in B flat major

No siento ningún rubor si os digo, que ignoraba que Haydn escribió un concierto para clarinete. Es más. Lo que siento es un poco de miedo, por si no es correcto el vídeo y se trata de un error, porque en internet, no existe absolutamente ninguna noticia de este concierto. No existe hasta donde yo he llegado, después de casi una hora de buscar, para informar el concierto. No he encontrado nada.No es verdad. He encontrado más música de Haydn para clarinete. Os pediría por favor, que si alguno de vosotros conocía el concierto y puede documentarlo un poco, si no puede dejar un comentario, me hiciera llegar a mi correo alguna información. jantoniosole@gmail.com. Que lo disfrutéis.  
Intérpretes ; Dieter Klöcker, clarinet; Prague Chamber Orchestra. Feliz dia a tod@s

domingo, 26 de abril de 2015

Clarinetes de Carlos Casanova.







Estos tres clarinetes fueron construidos por Oskar Oehler,recien estrenado el siglo XX. Tienen mas de cien años, y están en perfecto estado.
Un regalo para la vista y los sentidos.

jueves, 23 de abril de 2015

CV y entrevista a Carlos Casanova.

Hace aproximadamente un mes y poco más,navegando por youtube, buscando algún vídeo para publicar en el blog, encontré algunos homenajes de Bela Kovacs, que tocaba un joven clarinetista, llamado Carlos Casanova. Yo no conocía a Carlos Casanova, pero escuché los dos homenajes y decidí publicarlos. En Youtube, hay miles de vídeos de clarinetistas, y muchos que interpretan los homenajes de Bela Kovacs, pero yo me propuse,desde que administro el blog no publicar ningún vídeo, que no lo tocara un clarinetista con calidad. Carlos la tiene y mucha. Pasados unos días, de una manera casual contactamos Carlos y yo y me invitó a su pueblo en el que junto a Wolfang Meyer, daban una Master Class.Un dia antes tuve que llamar a Carlos y declinar su invitación por problemas de salud.Soy como he dicho muchas veces un hombre "mayor" y aunque estoy muy bien es normal tener ciertos achaques que en más de una ocasión no me permiten cumplir con la palabra dada.Carlos aprovechando que tenía que venir a Valencia, me visitó,y pasamos un día casi entero juntos. Poco más tengo que añadir, pero no sería justo que terminara esta introducción sin agradecerle a Carlos la visita,y su día "perdido" junto a un "viejo" ( los entrecomillados para que no dé sensación de un pesimismo exagerado), que pasó un dia excelente junto a un brillante clarinetista, hablando, del..clarinete. Biografía Carlos Casanova ha realizado estudios en la Internacional Sommer Akademie “MOZARTEUM” de Salzbug (Austria) con el Profesor Alfred Prinz (Solista Orquesta Filarmónica de Viena), en Berlín (Alemania) con el profesor Walter Seyfarth (Orquesta Filarmónica de Berlín) y en la pochschule fur Musik de Karlsruhe (Alemania) con el Profesor Wolfgang Meyer. También ha realizado cursos de técnica, interpretación, Música de Cámara, perfeccionamiento y repertorio con los Profesores Wenzel Fuchs (Solista Orquesta Filarmónica de Berlín), Reinhard Wieser (Solista Orquesta Sinfónica de Viena), Bela Kovacs (Profesor de la Universidad de Graz, Austria) y Louis Rossi (Solista y Constructor de Clarinetes). Es uno de los músicos más talentosos de su generación y uno de los pocos clarinetistas europeos que dominan brillantemente los dos sistemas de clarinete existentes, el francés y el alemán. Miembro fundador del Ensemble Stadler, Solistas Orquesta Sinfónica Europea y Solistas Valencia. En su repertorio como Solista ha interpretado las Obras más importantes para Cuerda y Clarinete de los principales compositores, centrándose en Mozart, Crusell, Spohr, Weber y Francaix. “Casanova toca su clarinete de modo muy expresivo con un sonido precioso y cálido ofreciendo preciosos matices desde lo gracioso a lo dramático.” Mónica Neuman, Festival Internacional de Nordhorn, Alemania “ En el año 2003 fue invitado por el ADEC (Asociación para el estudio y desarrollo del Clarinete) al I Congreso Nacional del Clarinete celebrado en el Real Conservatorio Superior de Madrid llevando a cabo un Recital. Coordinador y Profesor asistente en los Cursos y Masterclass realizados por el Profesor Wolfgang Meyer, es Profesor de numerosas masterclass en varios conservatorios y Centros de la Comunidad Valenciana y Madrid así como Director Artístico del Ciclo Internacional de Música que se celebra en La Albufera de Valencia. Numerosas Fantasías de Concierto para Clarinete y cuarteto cuerda le han sido transcritas y dedicadas por el compositor Valenciano José Manuel Morales, destacando La Fantasía de concierto sobre la Ópera de “Rigoletto” de Verdi, Fantasía de Concierto sobre la Ópera “El Cazador Furtivo” de C.M. Von Weber, La Fantasía sobre la Ópera Tosca de G. Puccini, La CI Darem la mano sobre la Ópera Don Giovanni de W.A. Mozart e Introducción, Tema y Variaciones de G. Rossini. También ha realizado el estreno de ANGST, para Clarinete Solista, Piano y Cuerdas con la Badischen Staatkapelle Karlsruhe (Alemania). “Excelente técnica y gran flexibilidad en todos los registros que combinados con la musicalidad hacen de Carlos Casanova un gran intérprete, del clarinete. Ulrich Wagner, Kapellmeister Sttatstherater Karlsruhe. Alemania. Es el primer Clarinetista Español en grabar la integral de los cuartetos con Clarinete del compositor Finlandés B.H. Crusell así como los Dúos junto al Clarinetista Wolfgang Meyer, con el que ha estrenado la Sinfonía Concertante de I. Muller en versión para dos Clarinetes y Cuarteto de Cuerda, Il Convegno de A.Ponchielli para dos Clarinetes y Cuerdas y Pequeña Mar, escrita y dedicada a Wolfgang Meyer y Carlos Casanova también por el Valenciano José Manuel Morales. Ha sido miembro del Ensemble Nacional de España de Música Contemporanea, estrenando en el Palacio Euskalduna de Bilbao los Ballests El Equilibrista y La Malaventura, Habiendo colaborado también con El Ensemble Volatile junto al Viola Estadounidense Jesse Levine, con el que realiza numerosos conciertos en el Festival Internacional de Música de Denia (Palma de Mallorca). ClarineteSolista Colabora con el American String Quartet, Solistas Orquesta de Valencia, Solistas de Baleares, Karlsruhe Solisten, Orquesta Sinfónica del Mediterráneo, Orquesta del Cantábrico, Cuarteto de Cuerda de la Orquesta Sinfónica de Palma, Camerata Sa Nostra, Orquesta Clásica de Valencia, Orquesta Filarmónica Estatal de Sibiu (Rumania), Orquesta Sinfónica de Moldavia, Turiae Camerata y La Orquesta Filarmonía, con la que realiza en El Auditorio Nacional de Madrid un Concierto Homenaje a Claudio Prieto así como la grabación para la Fundación de la Zarzuela Española en el Teatro Calderón de Valladolid de un monográfico sobre la Zarzuela. Carlos Casanova ha compartido escenario en diferentes Auditorios con José Carreras, Pedro Iturralde, Sabine Meyer, Bela Kovacs, Placido Domingo, Wolfgang Meyer, etc. También ha sido Clarinete Solista de La European Symphony Orchestra y fundador del Ensemble Solistas Orquesta Sinfónica Europea realizando giras por todos los países de la Comunidad Europea y festivales Internacionales de Música más prestigiosos de la Península. Carlos Casanova utiliza en sus conciertos clarinetes O.OEHLER (Berlín 1910). 
Entrevista Tuve el placer de hablar con Carlos Casanova, con pausa, sin prisas, teníamos tiempo, él ( hombre siempre atareado) y yo. Yo porque cómo ya habréis leído más de una vez, soy un hombre jubilado, que una vez hechas algunas cosas a primeras horas del día el resto puedo hacer lo que más me apetece. Él porque es un hombre generoso, y estaba dispuesto a pasar unas horas conmigo. Fue una conversación larga y por supuesto hablando siempre de lo mismo .El Clarinete. Se mezclaban las preguntas con la charla, que algunas veces nada tenía que ver con la pregunta, porque Carlos se apasiona hablando del clarinete, y porque a mí me gustaba escucharle. No es una entrevista al uso, no seguimos ningún formato, así que más puede ser el resumen de una conversación. Claro, que lo primero que le pregunté fue si tenía antecedentes musicales en su familia y me dí cuenta que la pregunta le había producido una sentimiento de tristeza-Carlos como muchos de nosotros, empezó con muy pocos años, con el Requinto, instrumento que pertenecía a un primo hermano de su madre, Vicen, una gran mujer, que tocaba el piano, y que Carlos me confesó que fue ella, la que le motivó para que estudiara música. No se refiere a nadie más.”.Mi madre,Vicen.” (q.e.p.d.) Cursa el grado elemental en el conservatorio Luis Milán de Xátiva. El grado medio, ya con el clarinete, en el conservatorio de Ribarroja del Turia. Hace 7º por libre y se examina en el conservatorio Superior de Música de Valencia y Octavo en el Superior de Castellón. Después de terminar el Grado Superior, seguiste estudiando? Bueno, tuve unos años que dejé, no el clarinete, sino el pensar en continuar estudiando, o en presentarme a una oposición, intentar ganarla, y acomodarme. Después de pasar estos años, un poco al “margen”,decidí marcharme a estudiar a Alemania, dejando un puesto de trabajo en Albacete que por cierto estaba muy bien renumerado. Me marché a estudiar con Walter Seyfarth, clarinete mi b solista de la Orquesta Filarmónica de Berlín, para continuar con Wolfang Meyer, el que considero mi profesor, ese profesor que todos tenemos uno en la vida, aunque hayamos estudiado con muchos .Wolfang es un gran clarinetista, gran pedagogo, y sinceramente creo que todo lo que soy se lo debo a sus enseñanzas y a su generosidad como profesor y amigo. En el curso 1996-97, estudié en Salzburgo, en la Escuela Superior de Música ("Musikhochschule"), con Alfred Prinz.. Por qué cambias de tocar con clarinete sistema francés a sistema alemán o lo que es lo mismo del sistema Boehm a el Sistema Oehler? En primer lugar me hallaba en Alemania, escuchaba grandes clarinetistas alemanes, que naturalmente tocaban con el sistema Oehler, y me propuse tocar con el sistema Oehler, después de tocar muchos años con el sistema Boehm. Nada tenía que perder, porque si no me hubiera encontrado satisfecho con el cambio siempre hubiera podido volver a cambiar. De hecho sigo dominando el sistema Böehm también. Carlos, pero no es técnicamente más difícil el sistema Oehler que el Boehm? Evidentemente si. Y cuánto tardaste a adaptarte al nuevo sistema? A los seis o siete meses empecé una cierta confianza, pero hasta los dos o tres años, no llegué a madurar técnicamente con el instrumento. Por qué entonces te decides por seguir con el sistema Oehler,; que ventajas encontraste, mejor sonido, más afinación, etc? A ver, yo me quedé con el sistema Oehler porque me identifiqué con el clarinete, más que con el Boehm, Digamos que encontré lo que estaba buscando hacía años en sistema francés. Sin dudarlo, tenía todo lo que había intentado conseguir y no lo había logrado. No se trata de mejor o peor sonido, ni de mejor afinación. Ten en cuenta que el 80% de los clarinetistas de todo el mundo tocan con el sistema Boehm, y tocan de maravilla, basta citar, a Martin Frots, Alejandro Carbonare, a los clarinetistas españoles, que ocupan puestos destacados, en orquestas o como pedagogos, etc. Hay grandísimos clarinetistas tocando con el sistema francés, pero yo me encuentro más a gusto con el alemán. Ya que me hablas de grandes clarinetistas que con uno o el otro sistema, tocan con un hermoso sonido, perfectamente afinados, etc. quería preguntarte algo al respecto. No crees que es más una cuestión de gustos que otra cosa? Me explico. A mi con el sistema Oehler hay clarinetistas que me gustan mucho y otros no tanto, Quiero decir. Se habla de sonido más oscuro, de más homogeneidad, de más afinación y yo no estoy totalmente de acuerdo. Oigo clarinetistas alemanes, ocupando puestos de gran relevancia, solistas de las mejores orquestas, y su sonido, me parece muy pobre, por ejemplo en armónicos, en coloratura, etc. No es lo mismo escuchar a Sabine Meyer, Wolfang Meyer, que a…me reservo los nombres de los que no terminan de convencerme. Por ejemplo. Tú estás tocando ahora en mi casa, en mi cuarto de estudio, con un clarinete sistema alemán. Si yo no lo sé y te escucho sin verte, te prometo que no sabría que estabas tocando con ese sistema. No te parece que en los dos sistemas hay sonidos bellísimos y otros que no lo son tanto? Por supuesto que sí. La diferencia del clarinete alemán con el francés, como tú sabes, consiste en el taladro del instrumento. El tubo es diferente, y también en el número de llaves, que en el caso del sistema francés facilitan mucho ciertos pasajes, sobre todo, las llaves duplicadas, como puede ser, la 1 A- 2-B, 3-C..7 -7 bis,,,,etc. Ahora bien, con el sistema alemán tenemos que superar esa facilidad usando muchas “tranquillas” que es más complicado, pero sin embargo, facilita, que ciertas notas se puedan hacer en varias posiciones distintas, según la afinación o el color que necesites en cada una de ellas. Por ejemplo el do….se puede hacer con cinco posiciones distintas, todas ellas, afinadas, pero con un timbre distinto, lo que te ofrece una vez dominadas todas ellas, la posibilidad de tocar el do, con la posición más conveniente según el pasaje que continúe, lo que a la hora de la interpretación facilita mucho el fraseo. Carlos tenía el estuche abierto con tres clarinetes Oscar Oehler, del año 1910, perfectamente restaurados, de ébano, .Él los miraba con mucho cariño, yo con inmensa curiosidad, pues es la primera vez que tenía un clarinete alemán al alcance de la mano. Le dije si podía probar uno de ellos, y por supuesto que encantado montó uno y con mi boquilla, (material francés), hice unas notas..pocas..muy pocas,,porque efectivamente es complicado. Pero mereció la pena la experiencia de probarlo. Los clarinetes de Carlos más que centenarios, están “nuevos”. Nadie podría adivinar que esas tres joyas tienen 109 años. Una maravilla. Actualmente cual es tu actividad cómo clarinetista? Tengo varios alumnos a los que atiendo en mi casa, o se reúnen en Madrid, o cualquier otra ciudad a donde me desplazo para darles clase. Con Wolfang Meyer, hacemos Masterclass, en algunas ocasiones. Pero la actividad que más me gusta es la música de cámara, que interpreto en recitales. Cual es tu repertorio preferido? Sin duda las fantasías de óperas, que ha arreglado para cuarteto de cuerda y clarinete, el compositor valenciano José M. Morales. Fantasías arregladas para mí, que toco acompañado por el cuarteto de cuerda Valencia, miembros todos ellos de la Orquesta de Valencia. No quiere decir que sólo sean las fantasías lo que toco. He tocado los tres quintetos más importantes escritos para clarinete. El de Mozart, Brahms y Weber, etc Me gustaría saber que estudias a diario, qué ejercicios haces. Cuando empiezo a estudiar lo primero que me exijo es estar muy concentrado y ser muy exigente en todo lo que hago. Trabajo las escalas M y m, en terceras, cuartas, quintas, etc. Toco muy lento para ganar capacidad pulmonar y columna de aire. Siempre lo hago con el metrónomo y el afinador. Suelo empezar tocando pronunciando la sílaba da, o sea un picado muy largo, con la garganta abierta, cómo pronunciando la vocal A. Para trabajar el picado, que es algo que tenemos que trabajar mucho los clarinetistas, lo hago con muchas combinaciones rítmicas, sobre escalas, terceras o incluso pasajes de algún estudio o de algún solo de orquesta difícil. Por ejemplo el solo de la cuarta sinfonía de Beethoven,la Novia Vendida, etc. En definitiva lo que te comentaba al principio, creo que lo más importante es practicar el estudio con una exigencia máxima y con una concentración absoluta, y si en algún momento pierdes ambas, y tocas sin saber muy bien para qué y por qué, es mejor, limpiar el clarinete y enfundarlo. La charla va terminando por que sin darnos cuenta se ha hecho tarde. Carlos tiene que hacer todavía algunos kilómetros, y aún que el tiempo había pasado rápido, convenimos que lo mejor era terminar y seguir en otra ocasión. Por mi parte, agradecerle a Carlos su amabilidad y su predisposición absoluta a colaborar conmigo para que su opinión valiosa, quede reflejada en el blog, para que todos podamos aprender de lo que nos relata, pues a pesar de su juventud, es un clarinetista con mucha experiencia y un gran equipaje lleno de sabiduría clarinetística. Gracias Carlos. HTTP://WWW.CLARIPERU.ORG/CLARINETE_ALEMAN.HTML.http://carloscasanova.es/    
Carlos Casanova Clarinet - Fantasy on the Opera D. Giovanni B.H.Crusell Three Progressive Clarinet Duets. Nr.1 in F. Intérpretes. Carlos Casanova - Wolfgang Meyer

lunes, 20 de abril de 2015

Franz Anton Hoffmeister. Concierto para 2 clarinetes y orquesta

Franz Anton Hoffmeister (*12 de mayo de 1754 en Rottenburg am Neckar - †9 de febrero de 1812 en Viena) fue un compositor alemán. Franz Anton Hoffmeister Nacido en Rottenburg am Neckar, se trasladó a Viena a la edad de catorce años para estudiar Derecho. Al terminar sus estudios decidió seguir la carrera musical, y a mediados de 1780 se había convertido en uno de los compositores más populares de la ciudad, con un extenso y variado catálogo de obras. Su reputación hoy en día se debe casi exclusivamente a sus actividades como editor de música. En 1785 fundó en Viena una de las primeras empresas de edición musical. Hoffmeister publicó sus propias obras y las de muchos compositores importantes de la época, entre ellos Haydn, Mozart, Beethoven, Clementi, Albrechtsberger, Dittersdorf y Vanhal. Estos famosos compositores también eran amigos personales de Hoffmeister. Mozart le dedicó su Cuarteto de cuerda n.º 20 en re mayor (KV 499), y Beethoven le dirigió una carta llamándolo su "más amado hermano". Sus actividades como editor musical alcanzaron su cénit en 1791, pero a partir de entonces se dedica más a la composición. La mayoría de sus óperas fueron compuestas y escenificadas en la primera parte de la década de 1790, y esto, combinado con una aparente falta de buen sentido para los negocios, llevó a una notable disminución en su producción. En 1799 Hoffmeister y el flautista Franz Thurner realizan una gira de conciertos que debía llevarlos hasta Londres, pero no llegaron más allá de Leipzig, donde entabló amistad con el organista Ambrosius Kühnel. Ambos aparentemente decidieron crear una casa editorial musical en esta ciudad, ya que en menos de un año fundan el Bureau de Musique, que en 1802 publica la primera edición de las "Obras para teclado" de Johann Sebastian Bach en catorce volúmenes. Hasta 1805 Hoffmeister mantuvo su interés tanto por la editorial vienesa, como la nueva en Leipzig, pero en marzo de 1805 transfirió la propiedad del Bureau de Musique a Kühnel. Su interés por la empresa vienesa también disminuyó, y en 1806, aparentemente para dedicarle más tiempo a la composición, la vendió a la empresa Chemische Druckerey. A Hoffmeister se le debe un extenso repertorio para flauta, no solamente conciertos, sino también música de cámara con la flauta como instrumento solista. Muchas de estas obras fueron compuestas en Viena debido al creciente número de músicos aficionados para quienes la flauta era su instrumento favorito. Además de la música para flauta, Hoffmeister compuso al menos ocho óperas, más de 50 sinfonías, varios conciertos (al menos 25 de ellos son para flauta), entre ellos el Concierto para viola y orquesta en D mayor, que aún es ejecutado frecuentemente, una gran cantidad de composiciones de música de cámara, música para piano y varias colecciones de canciones.  Intérpretes;DieterKlöcker, clarinet Waldemar Wandel, 2nd clarinet Münchener Kammerorchester Hans Stadlmair Cuando puedo publicar un concierto para clarinete o dos clarinetes cómo es el caso, de un compositor contemporáneo de Mozart, siento una enorme satisfacción. Muchos clarinetistas, entre los que me encuentro ( en época pasada) pensábamos que el clarinete,adquiere verdadero protagonismo con el Genio, y naturalmente que es así, sobre todo por el concierto en La para clarinete ( me niego a poner Op, ni nada, siempre será el concierto de Mozart para clarinete, y todos lo identificamos, entre otras cosas porque desgraciadamente no escribió ningún otro)pero comprobar que fueron muchos los que un poco antes o un poco después escribieron para nuestro amado instrumento, es una gran satisfacción. Por si esto fuera insuficiente, es descubrir repertorio, conocer conciertos que posiblemente no conocíamos, y podemos ampliar nuestro conocimiento del clarinete en la época que Mozart, o en el caso que nos ocupa Hoffmeister, pensaron que el clarinete, más pronto que tarde se convertiría en un instrumento indispensable, en la orquesta, en la música de cámara,etc. Lo dicho una gran satisfacción. Muchas gracias a tod@s los que visitáis el blog.Os deseo un feliz día.

sábado, 18 de abril de 2015

Kari Kriikku - Kimmo Hakola - Diamond Street, for Solo Clarinet

Kimmo Hakola (nacido el 27 de julio 1958) estudió en la Academia Sibelius bajo Einojuhani Rautavaara y Eero Hämeenniemi. Ganó Tribuna de Compositores de la Unesco 'en dos ocasiones: en 1987 con su cuarteto de cuerda y en 1991 con su Capriole para violonchelo y clarinete. La música de Hakola se ha realizado en varios eventos musicales importantes y festivales. Actuaciones de sus obras suelen atraer un interés excepcional. Hakola es un creador de intensos dramas musicales que no reconocen límites estilísticos o expresivas. Su música es una combinación de inflexible fuerza dramática y la calidad musical excepcional. La maestría musical se manifiesta en todos sus logros resultantes de comunicatividad y riqueza de sonido que hablan acerca del regocijo del compositor a descubrir su propio idioma. Hakola ha compuesto dos óperas. Los maestros cantores de Marte es una ópera encantadora caricatura incluyendo elementos inusuales para una ópera, y su segunda ópera La semilla de mostaza es un estudio serio de un disidente religioso finlandés. El Concierto para piano fue estrenada en el Festival de Helsinki en 1996, es una obra sin precedentes en la nueva música finlandesa en su gama expresiva, variedad de estilos y ámbito de aplicación. El Concierto para clarinete ha sido un éxito rotundo y se ha realizado en varias ocasiones desde el estreno en 2001. El Concierto de Cámara encargado por la música actual se estrenó en Milwaukee, EE.UU. en marzo de 2002. Hakola también ha compuesto una Sinfonietta en 1999. Uno de los más grandes Hakola obras es Le Sacrificio , un oratorio atado en estrecha colaboración con la película de Andrei Tarkovsky y encargado por el Ircam para una actuación en París en noviembre de 2002. Fue uno de los tres ganadores del primer Premio awarderd Teosto por los compositores finlandeses Derechos de Autor Sociedad Teosto en diciembre de 2003. La obra de Hakola incluye también obras de cámara, el mayor peso de ellos sus tres cuartetos de cuerda y el Quinteto para clarinete desde 1998. Sus trabajos más recientes incluyen cinco clips para clarinete y orquesta de marimba, los Verdoyances crepúsculos (2003) y Consuelo (2004) para violonchelo y piano. Kimmo Hakola es compositor en residencia de la Orquesta Ciudad de Joensuu. Además de componer, también se ha orientado hacia la realización y actuando como pianista ejecutante. Ha sido el director artístico de la Musica nova festival desde 1999, y el director artístico de la Radio Finlandesa Coro de Cámara desde 2005. Más información: Fennica Gehrman Centro de Información de música finlandesa artículo en The New York Times (26 de abril de 2007) De Kari Kriikku, no es la primera que p ublico un vídeo. Un clarinetista que aborda todos los estilos y además muy bien. Tenéis su biografía en la etiqueta correspondiente. En cuanto a Kimmo Hakola, si que es su presentación en el blog. Cómo podréis leer en su pequeña biografía se trata de un compositor nacido el siglo pasado, pero ya pasada la primera mitad.Escuchar música para clarinete de compositores prácticamente desconocidos, creo que es muy interesante, si además pertenecen a una época que escribian música, a la que no estamos demasiado acostumbrados.Nada se queda parado. Nada. Tampoco la música, y es claro que podrá gustarnos más o menos, pero es una evidencia que hay que tener muy en cuenta. No me refiero precisamente a este compositor, pero si a todos los compositores que escriben para nuestro instrumento, y para todos los demás que ya nada tiene que ver, con Weber, Krommer,ni por supuesto con Mozart.Espero que lo escuchéis con interés aún que no os guste. Muy feliz día a tod@s

miércoles, 15 de abril de 2015

El clarinete Contrabajo

El clarinete contrabajo es el más largo de la familia de los clarinetes que haya sido producido regularmente y que su uso se haya extendido significativamente. Los clarinetes contrabajos modernos son afinados en Si♭ (bemol), llegando dos octavas más bajo que el clarinete soprano en Si♭ y una octava descendente del clarinete bajo. Algunos de los modelos de clarinetes contrabajos tienen una tesitura que se extiende a lo grave hasta un mi♭, mientras que otros pueden llegar a un re e incluso a un do. Algunos de estos instrumentos, en el pasado estaban afinados en Do; la pieza de Arnold Schoenberg, Fünf Orchesterstücke especifica el uso de un clarinete contrabajo afinado en la, pero no existe evidencia de que dicho instrumento haya existido. A diferencia de otros clarinetes, el clarinete contrabajo es construido usualmente con una sola llave de trino para la mano derecha en vez de las acostumbradas cuatro llaves. Esta llave tiene misma función que la más baja de las llaves de trino en otros clarinetes. En ocasiones es conocido por el nombre Clarinete pedal, término que se refiere no a ningún mecanismo del instrumento sino a una analogía entre sus tonos bajos con los tonos pedales del trombón, o la sección pedal del órgano. Historia El clarinete contrabajo más antiguo conocido es el contre-basse guerrière inventado en 1808 por un constructor llamado Dumas of Sommières; poco más es conocido sobre este instrumento. El batífono (o batyphone en inglés, bathyphone en alemán, y batyphon en francés) era un clarinete contrabajo resultado de la búsqueda de W. F. Wieprecht para obtener un contrabajo para los instrumentos de caña. El batífono estaba hecho para alcanzar el doble del tamaño del clarinete en do, y teniendo la división de la escala cromática arreglada para estar de acuerdo con las reglas acústicas. Para la conveniencia de no tener que cubrir con los dedos orificios muy separados entre sí, eran utilizadas llaves pivote o manivela. Este instrumento estaba construido de arce, tenía una boquilla de clarinete de tamaño normal, conectada por medio de un codo cilíndrico de metal a la parte superior del tubo y a una campana de metal. La afinación se encontraba dos octavas por debajo del clarinete en do, afinación que correspondería a la moderna tuba. El tono era placentero y redondo, pero no lo suficientemente poderoso para el registro contrabajo en una banda militar. El batífono tenía además una seria desventaja: podía ser tocado con facilidad solamente en las tonalidades cercanas, como sol y fa mayor. El batífono fue inventado y patentado en 1839 por F.W. Wieprecht, director general de las bandas militares de Prusia, y por E. Skorra, constructor de instrumentos para la corte de Berlín. En la práctica este instrumento resultó tener poca utilidad, y fue superado por la tuba baja. Un batífono que lleva el nombre de sus inventores formó parte de la colección Snoeck, que fue adquirida por la colección de Berlín de instrumentos musicales antiguos en la Technische Hochschule für Musik.1 Poco después del invento de Wieprecht, Adolphe Sax creó su clarinette-bourdon en si ♭. Composiciones que utilizan el clarinete contrabajo Existen pocos solos para el instrumento, entre ellos: Scherzo Fantastique de Alfred Reed Ombra de Franco Donatoni Anubis, Nout de Gérard Grisey interference de Richard Barrett - también emple al voz del ejecutante y un tambor bajo de pedal. Algunas de las composiciones más importantes que incluyen un clarinete contrabajo son: Triple Concerto para clarinete, clarinete bajo y clarinete contrabajo de Donald Martino Éclairs Sur l'Au-Delà de Olivier Messiaen Sinfonía No. 1 ("Of Rage and Remembrance") de John Corigliano Variaciones Fantasía sobre un tema de Niccolò Paganini de James Barnes El diluvio de Igor Stravinsky Sinfonía No. 7 de Hans Werner Henze Requiem de György Ligeti Quatre chants pour franchir le seuil de Gérard Grise Referencias Esta descripción del batífono es la traducción de una cita con revisiones menores del artículo "batífono" perteneciente a la Undécima edición de la Encyclopædia Britannica, que resulta ser en gran parte un derivado de un tratado en manuscrito sobre instrumentación, escrito por Wieprecht en 1909, y que se encuentra en poder de Herr Otto Lessmann en Berlín, además de que reproducida por C.R. Day en Descriptive Catalogue of the Musical Instruments of the Royal Military Exhibition, London, 1890 (Londres, 1891) p. 124; el artículo de la enciclopedia Britannica tiene la firma:(K.S.) (Fuente Wikipedia) Julius Fucik - Polka Comique for Contrabass Clarinet solo with Concert Band Piccolo A-flat clarinet and Contrabass clarinet duo En el dúo de clarinete contrabajo y clarinete Piccolo, tocando en ese registro y creo que excesivamente fuerte, me dá la impresión que siempre toca la misma nota (sé que no..jajajajaj), pero prefiero el sonido del vídeo anterior. Espero os resulte interesante y si os gusta, un clic en la f no cuesta nada, cuando se estropee vuestro ratón por clicar en la f de los vídeos, ( que os gusten naturalmente) os regalo uno. Feliz día a tod@s

lunes, 13 de abril de 2015

Fantasia Sonata de John Ireland, para clarinete y piano

Intérpretes: Clarinet: Emma Johnson Piano: Malcolm Martineau Feliz día a tod@s

Biografía de Jhon Ireland



John Ireland nació el 13 de agosto de 1879 en Bowden, Cheshire, en un entorno de gran cultura (aunque los intereses de sus padres eran más literarios más que musicales). Su formación inicial fue en Leeds Grammar School, pero cuando tenía catorce años se trasladó a Londres, donde pasaría las seis décadas siguientes . Estudió piano en el Royal College of Music de Londres desde 1893 hasta 1897, continuando en el Colegio hasta 1901 como un erudito  en composición, bajo sir Charles Villiers Stanford. A la edad de dieciséis años fue galardonado con una beca en la universidad real de organistas, el estudiante más joven en hacerlo,  . Sus compañeros de estudios en el RCM incluyen Vaughan Williams y Holst. Se tomó su Ph.D. de la Universidad de Durham en 1906, y fue más tarde (1932) para ser investido doctor honoris causa allí. Desde 1904 hasta 1926 Ireland ocupó el cargo de organista en San Lucas, en Chelsea, que le permitió tiempo para componer. Él también ganó una sólida reputación como profesor muy respetado. Poco después del final de la Primera Guerra Mundial se unió al personal de la Royal College of Music

sábado, 11 de abril de 2015

John Corigliano- Clarinet Concerto, Guy Yehuda - Clarinet Soloist

Es la primera vez que publico un vídeo de Guy Yehuda, y debería darme vergüenza, pues sin duda se trata de uno de los grandes entre los grandes.Impresionante el concierto que toca de John Corigliano, del que tendremos que escuchar más música, porque el concierto tiene una instrumentación asombrosa. No es un concierto en el que podamos apreciar la gran calidad que tiene Yehuda, en cuanto fraseo, sonido y demás, por el tipo de música que interpreta, pero sí que su técnica y dominio del clarinete es increible, según mi modesta opinión.Espero que lo paséis muy bien, y disfrutéis escuchando a Guy Yehuda . Feliz día a tod@s

viernes, 10 de abril de 2015

MILAN RERICHA, Clarinet - Vittorio Monti (1868 - 1922) - Csardas

Hoy es sábado, día de descanso.Escuchar a Milan Rericha,  y pasadlo bien. Algunas veces, hay que romper con la "seriedad musical", y escuchar para divertirse, sin pensar si el fraseo, el ligado, el staccato está más o menos  bien. Milán Rericha se prodiga mucho en internet, debe ser un hombe muy divertido por las fotos que  veo en su muro de Facebook, y además toca todo lo que le ponen en el atril. No está encasillado, no le importa tocar Montí, y pasarlo bien .Es un hombre que siempre me  sorprende y en este caso por su stactto.
Pues lo dicho, feliz fin de semana a tod@s

miércoles, 8 de abril de 2015

Historias de una historia. Borja Ordoñez,clarinetista.

A Borja lo conocí cuando yo era ya un hombre casi a punto de jubilarme y él era un "chavalín". El director de la banda de música que tocaba Borja, me pidió que fuera a tocar con ellos un concierto, que andaban regular de clarinetes y entre que era amigo y a mí no había que insistirme mucho, para colaborar en casos concretos como era el que nos ocupa, fui a ensayar un día y al concierto. Pues el día del concierto lo conocí. Estábamos esperando la hora para empezar, sentados en un sofá y empezamos a hablar.Bueno fui yo el que empezó, como casi siempre. Borja tocaba entonces con una boquilla alemana, que me dejó probar. Poco pude hacer con ella, por que sabéis que la embocadura es muy distinta. Le dije que no terminaba de gustarme y él con el desparpajo de un chaval que estaba enamorado de su boquilla y de su clarinete me dijo que su sonido con aquel material era el que a él le gustaba.Pero lo dijo no con orgullo pero sí, convencido totalmente de lo que expresaba. Pasaron muchos años y un día de forma casual, me enteré que Borja, vivía en mi pueblo, que está al lado del pueblo dónde habiamos coincidido tocando en la misma formación. Borja era ya un hombre, había terminado los estudios, y en el momento que le conocí estaba estudiando en Austria, con cretamente en Graz. Nos pusimos en contacto y más de una vez hemos estado juntos, hablando, tocando en un Grupo de Clarinetes, y sobre todo a través de Facebook.Fue un día a escucharle, tocaba un recital en la Universidad de Valencia. En principio se le notaba mucha sultura. Antes de empezar la audición, la presentó, sin que sus nervios aparentemente estuvieran minimamente alterados. Tocó muy bien. Me gustó mucho y así se lo hice saber por que además es lo suficientemente modesto, que antes de que se lo dijera me pidió mi opinión. Se notó que Borja estaba acostumbrado,muy acostumbrado a tocar recitales, a tocar delante de un juado en oposiciones, y naturalmente a que durante dos años se había estado formando en Austria. A pesar de la edad que nos separa, que es kilométrica,nos llevamos muy bien, lo que le agradezco mucho, porque no es la primera vez que manifiesto que a los "viejos" hay personas que no nos quieren tener demasiado cerca.Será que somos muy pesados.Seguro. Os dejo, la historia que nos cuenta Borja de sus tres años en Austria, para que comparemos, y nos quedemos con lo que más nos guste. Yo indudablemente si fuera un chaval joven, haría todo lo posible para hacer lo que hizo Borja, y muchos otros chavales;marcharme a estudiar al extranjero,y no porque en España no tengamos buenos clarinetistas que son magnificos profesores, los hay, pero leer la historia de Borja y veréis porque os lo digo. Historias de una historia. Valencia, 2010, Estudiaba en el Conservatorio Superior “Joaquín Rodrigo” de Valencia 3º curso y ese mismo año se anunció la posibilidad de acceder a becas “Erasmus” para viajar a otros países europeos para continuar los estudios, en mi caso, para acabar el superior o Bachelor como se le llama fuera. No lo dudé, hablé con el responsable de relaciones internacionales y comencé mi búsqueda de destino. Hablé con el solista de la Orquesta de Valencia y me recomendó pedir como destino Austria, José conocía al profesor y sabía que me admitiría cuando le mandara una grabación de muestra. Así ocurrió y después de semanas de nervios llegó la confirmación. Acabaría el superior en una universidad europea. Al llegar a Graz me sentí como un Hobbit cuando sale de la comarca, ahí estábamos mi 1,72 de estatura, mi maleta, mis clarinetes y yo rodeados de gente que no bajaba de 1.80. Por suerte Bertram, el profesor de Graz, me estaba esperando fuera del aeropuerto para llevarme a casa de un amigo y hacerme la llegada más fácil. Lo primero que me sorprendió fue la cercanía del profesor, todos los años antes de comenzar el curso invita a una comida a todos los alumnos, fue muy divertido, yo no entendía nada de alemán y ellos no sabían nada de español. Allí me enteré que para continuar estudiando en la universidad tras el primer año debía tener el B2 de alemán, o en caso contrario no podría seguir en la universidad, se me antojaba imposible aquel día. Al principio del curso todo fué un caos, no tenía casa, no sabía las asignaturas que podía cursar, no sabía con quién podía hablar y no sabía el idioma, pero en las situaciones más difíciles te das cuenta que puedes encontrar amigos donde sea. Es increíble la seriedad institucional que existe en otros países, oficinas, secretarias, trabajadores que su único fin es facilitar la vida a los estudiantes. Otra gran diferencia que encontré fue el respeto del pueblo hacia la figura del músico, reconocen el esfuerzo y el arte, en las calles encontraba a gente tocando, pero esa gente podía ser músicos de la ópera de Graz que al acabar sus ensayos, salían a la calle en grupos de cámara a tocar para ganar un extra, símplemente lo que la gente quería dejar en los estuches, y había gente profesional que vivía sólo de eso, y no es barato vivir allí... Como en todos los sitios, en la universidad había gente muy buena estudiando, y también muy mala, pero los buenos eran realmente buenos, compañeros que han aprobado plazas en la sinfónica de Viena o en orquestas en Alemania y Suiza. El nivel del profesorado en general fue muy alto, solistas de orquestas o pedagogos reconocidos en toda Europa por su trabajo, aquí destacan nombres como Bertram Egger, Gerald Pachinger (solista de la Sinfónica de Viena), Markus Schön (solista de la ópera de Munich), Stephan Goerner (profesor en Zurich y Graz), Stephan Schilling (solista de la Bayerische Rundfunk), etc. Sin duda donde más cambio encontré fué en la clase de orquesta. Se preparan varios encuentros de una semana de duración donde se preparan diferentes repertorios, desde orquesta de vientos, grupos de cámara grandes u orquesta sinfónica. Los prepara un profesor especialista en dirección, y dirigen los alumnos más aventajados, pero los últimos días del encuentro un director de orquesta PROFESIONAL acude al encuentro para dirigir medio programa mientras el otro medio lo hace un alumno de dirección de la universidad. Esto hace tener un nivel muy alto a la orquesta y a los estudiantes de dirección. El punto álgido llegó poco antes de navidad. La universidad invita a un profesor reconocido para dar clases durante una semana a los mejores de cada profesor. En estos cursos he podido dar clase con Mate Bekavak, Wenzel Fuchs, Reiner Wehle y Sabine Meyer, gratis. Una experiencia inolvidable. A las pocas semanas de empezar las clases, Bertram me dijo que quería seguir siendo mi maestro después de aquel año y si yo quería, me guardaba una plaza para estudiar el máster, atónito le dije que tenía que hablarlo con mis padres, porque estos estudios suelen ser caros y no olvidaré la cara de Bertram riendo, yo no sabía aún la razón, pero riendo me dijo que el máster costaba lo mismo que el Bachelor, 18€ al semestre, durante 2 años, 72€ costaba el máster. En Austria, todos los estudios los subvenciona el estado, a parte, gracias a mis notas y cartas de recomendación, conseguí una beca de la universidad, que me ayudaba con 300€ mensuales durante todo el último curso. Tras 3 años en Austria y con un máster bajo el brazo emprendí el viaje de vuelta a casa, un viaje difícil porque no sabía por donde seguir mi camino, sin un puesto de trabajo ni perspectivas claras de conseguirlo. Por suerte encontré nuevos amigos en casa, amigos que me aconsejaron nuevos profesores para conocer más música y descubrí que en España hay más buenos músicos de los que me pensaba, el nivel de vientos en este país es excepcional, sólo hay que mirar las orquestas y jóvenes orquestas europeas. Es una pena ver este nivel y encontrar salas de conciertos vacías o cerradas, salas que costaron mucho dinero y que hoy no sirven para nada. Por desgracia la cultura en nuestro país no ocupa el primer lugar de las prioridades, pero no podemos culpar sólo a los políticos de ello. Los artistas debemos buscar la manera de atraer a más público, de hacernos destacar en mayor medida, buscar y crear nuevos proyectos, enseñar lo importante que es la cultura para una sociedad evolucionada y respetable. Feliz día a tod@s

lunes, 6 de abril de 2015

Franz Joseph Haydn. Quartet for clarinet & string trio No. 1 in B flat major

I. Allegro con spirito 00:00 II. Andante 09:51 III. Menuetto 16:32 IV. Finale. Vivace 20:41 Consorcio Classicum Dieter Klöcker, clarinete y director
Feliz día y feliz regreso a l@s que habéis estado de vacaciones.

sábado, 4 de abril de 2015

EL DÍA QUE SCHUMAN LLORÓ

En el blog de Cristina Sáez, he leído una muy buena entrada que me permito publicar, para que la leáis si os apetece. Estos días de vacaciones son muy buenos para leer y reflexionar. Todos admiramos a los grandes compositores, nos creemos que habrán vivido una vida de glorías y halagos, sin embargo la mayoría de ellos, de los más grandes,pasaron momentos de mucho dolor, de necesidad e incluso de miseria.Así de injusta es la vida. Os recomiendo que lo leáis entero pues podéis aprender cómo la música a la que tanto amamos, nos proporciona en más de una ocasión , más sufrimiento que otra cosa. Seguimos por que nuestra pasión por ella, es tan grande que superamos todas las dificultades, o intentamos superarlas, a base de sacrificio de voluntad y sobre todo de pasión. Así es la música y así somos los músicos, que anteponemos nuestra afición, nuestra voluntad férrea, para seguir adelante..será porque la música y los músicos somos diferentes.
El día en que se dio cuenta de que no podría volver a mover los dedos de su mano derecha, Robert Schumann lloró largo y tendido. El músico alemán, que había tocado el piano desde niño e incluso había compuesto sus primeras obras con tan sólo siete años, admiraba la ejecución de los más renombrados concertistas de su época, como Paganini y Liszt, y deseaba, por encima de todo, convertirse en un virtuoso como ellos. Quizás por ese motivo se empeñó con tanto ahínco en perfeccionar su técnica de teclado que, al final, acabó truncando su carrera como concertista. Tenía un talento innegable como pianista, pero consideraba que carecía de agilidad suficiente en los dedos, por lo que se hizo construir un teclado portátil que le permitiera ensayar continuamente. No obstante, aquel ejercicio intensivo no funcionó como él deseaba; entonces, ideó un aparato que colgaba de una polea del techo y al que se ligaba el anular y el meñique, y así se obligaba a ensayar durante horas y horas. (Reportaje publicado en Historia y Vida) Sin embargo, Schumann pronto se dio cuenta de que el método, lejos de funcionar, le estaba dañando la mano. Veía con asombro y desolación cómo sus dedos se obstinaban en desobededer sus órdenes y se agarrotaban y se contraían al tocar, sin que pudiera hacer nada para remediarlo, por lo que se forzaba aún más a practicar con las poleas. Lo que seguramente Schumann desconocía es que, por más que practicara, las limitaciones del cuerpo humano hacían imposible que sus dedos fueran completamente independientes unos de otros como él deseaba; y es que no existen músculos para cada una de las falanges y, además, entre los tendones hay un elevado número de interconexiones, que unen unas con otras. Por lo tanto, aquel método, lejos de funcionar, le dañó la mano para siempre y le impidió volver a tocar el piano. Robert Schumann padecía una distonía focal, una enfermedad conocida popularmente como el “cáncer del músico” y que afecta a uno de cada 200 intérpretes, según datos del Instituto de Fisiología y Medicina del Arte-Terrassa. Se trata de un repentino y misterioso transtorno por el que el cerebro incorpora un error en un movimiento automatizado y bloquea la movilidad de una parte del cuerpo; en el caso de los pianistas, de los dedos de la mano. Así, puede que Schumann fuera incapaz de tocar una simple escala de notas ascendente al piano, pero, en cambio, pudiera ejecutarla a la perfección sobre una mesa o pudiera escribir sin problema. Y es que, aunque se desconocen las causas exactas que la provocan, se sabe que está relacionada con el trabajo intensivo e incluso con la obsesión por el instrumento. Quizás fuera gracias esta enfermedad, que lo obligó a apartarse de su carrera como concertista, por lo que Schumann llegó a convertirse en uno de los compositores más importantes del siglo XIX. Y no es el único caso. La historia de la música está repleta de artistas que sufren problemas de salud derivados de su profesión; de hecho, el 75% se lesionan en alguna ocasión, según datos aportados por la Fundación Ciencia y Arte, y de esos, uno de cada tres deben abandonar su carrera, tal y como les ocurrió a Leon Fleischer y Gary Graffman, dos prestigiosos pianistas norteamericanos que, a mediados de la década de los 80, en las cúspides de sus carreras, se vieron apartados de los escenarios tras diagnosticarles, también, una distonía focal. “Cuesta encontrar casos de artistas contemporáneos que admitan abiertamente que han tenido alguna lesión” , explica el doctor Jaume Llobet, al frente del Instituto de Fisiología y Medicina del Arte-Terrassa, uno de los escasos centros que existen en todo el mundo en el que diagnostican y tratan a pacientes que proceden de las artes escénicas, como músicos, bailarines o acróbatas. “Existe un tabú muy importante a la hora de asumir la lesión, a diferencia de los deportistas, porque se suele asociar a una mala técnica y, por tanto, la mayoría de intépretes trata de esconderla”, añade. La dolencia más frecuente es el sobreuso muscular. “Un pianista, si tiene que prepararse un concierto, puede pasarse hasta ocho o nueve horas ensayando; sus músculos pierden resistencia, por lo que suele sentirse cansado nada más comenzar a tocar. ¡Pero eso es totalmente normal! Lo mismo le pasaría a cualquier deportista si entrenara el mismo número de horas”, explica la fisioterapeuta Sílvia Fàbregas, también del Institut de Fisiologia i Medicina de l’Art, en Terrassa. Demasiado exigentes La mayoría de lesiones que padecen los artistas se producen porque sus cuerpos no están preparados para responder a tanta exigencia. El caso más evidente es el de los instrumentos de viento, como el clarinete o la trompeta; para tocarlos, el músico debe ejercer una presión prolongada equivalente a 20kg de peso contra los labios para producir, por ejemplo, un sonido aguo. No obstante, la musculatura orbicular labial apenas tienen unos pocos milímetros y es, además, muy delicada, por lo que en algunos casos puede acabar rompiéndose, como le sucedió al célebre Louis Amstrong. A este músico se le conocía con el sobrenombre de “ Sachmo” en los clubes, de ahí que ahora esta lesión reciba el nombre de “síndrome de Sachmo”. No es un caso aislado. De hecho, el 40% de los instrumentistas de viento padecen este tipo de problemas en los labios, su principal herramienta de trabajo. En el centro de Terrassa han desarrollado una máquina diseñada especialmente para este colectivo y que es capaz de medir la fuerza de los labios en los saxos. También trabajan con software propio para calcular la presión que cada músico debe ejercer sobre las teclas del piano a la hora de interpretar una partitura; conectan el instrumento al ordenador y analizan estadística y comparativamente la ejecución del pianista. Y es que, tal y como alerta Llobet, “muchas de las partituras clásicas que se interpretan hoy en día fueron escritas para instrumentos que no tienen nada que ver con los actuales, como es el caso de Bach y sus obras para clavicordio”. Este instrumento tenía teclas muy livianas, que apenas hacía falta rozar para que generaran sonido. El piano actual es muy diferente. Cada tecla pesa cerca de 600 gramos, de manera que el músico tiene que ejercer una mayor fuerza de presión para interpretar estas obras”. “En ocasiones, el artista no es consciente de que determinadas partituras suponen un riesgo para él”, opina Rosset. Es el caso de Litz y Paganini, un pianista y un violinista que componían en función de sus características físicas; ambos padecían una enfermedad genética, la aracnodatilia, que hacía que tuvieran unos dedos larguísimos y muy elásticos. Ambos fueron dos virtuosos de su tiempo y están considerados de los mejores de todos los tiempos. Su técnica asombraba al público de la época, qeu llegó a pensar que existía algún tipo de influjo diabólico en él por sus adelantos musicales. De Niccolò Paganini se decía que en la mayoría de sus apuntes aparecía una nota extraña, la “nota 13” y que el músico italiano era capaz de interpretar obras de gran dificultad únicamente con una de las cuatro cuerdas del violín, retirando las tres primeras. Y aunque la creencia popular era que la extraordinaria longitud de sus dedos –¡sus manos medían 45cm!- se debía a las horas dedicadas a la práctica del violín, lo más probable es que padeciera el síndrome de Marfan, una enfermedad del tejido conectivo que se caracteriza por un aumento inusual de la longitud de los miembros. De ahí que pudiera tocar tres octavas sin esfuerzo. “Con una mano normal, si quieres interpretar al violín a Paganini o al piano a Litz, debes realizar un esfuerzo inmenso que a menudo acaba en lesión”, considera Llobet, especialista en medicina del arte- Otro ejemplo es Rachmaninoff, que medía casi dos metros y llegaba a tocar en el piano hasta 12 notas con una mano, lo que supone unos 30 cm, algo difícil para una mano normal. Los otros males Existen otras lesiones mucho más raras y peculiares como la denominada ‘cuello del violinista’, un quiste sebáceo que se forma debido a la fricción repetida del instrumento en la piel y que se suele infectar. O la alergia que desarrollan muchos de ellos a causa del contacto con la brea o resina que utilizan para tocar las cuerdas de sus instrumentos. También padecen de afecciones a causa del contacto continuo del violín o la viola entre el mentón y la mandíbula. O el ‘pezón del guitarrista’, en la que se produce una irritación del pezón del artista a causa del roce continuo del canto de la guitarra. Buena parte los percusionistas pierden oído por una exposición constante a instrumentos como los platillos y las campanas tubulares. Y los timbalistas acaban desarrollando una neurosis a causa del efecto de las ondas sonoras contra el cráneo y la cara. Los trompetistas y otros tañedores de instrumentos metálicos corren el peligro de padecer glaucoma, además de sordera. Y es que la mayoría de instrumentistas que tocan en las orquestas sinfónicas y filarmónicas en el escenario producen y han de soportar el estruendo de sus ejecuciones, que puede alcanzar los 130 decibelios, el mismo volumen de sonido que produce un avión de propulsión al despegar. Y eso sin contar con los problemas de columna que tienen la mayoría de músicos debido a una mala posición reiterada del cuerpo. Reprogramar el cerebro El origen de la distonía focal podría encontrarse en los pliegues del cerebro. El movimiento de las manos se controla desde la corteza cerebral y, tras muchos años de entrenamiento, las escalas, las notas, determinadas partituras han quedado grabados en esa región cerebral como conexiones neuronales fijas. Por qué un buen día un dedo comienza a moverse de forma diferente, sigue siendo un misterio, sobre todo porque la mano es capaz de seguir realizando todos los demás movimientos, como escribir, coser un botón, sin dificultad. Por este motivo, durante mucho tiempo se consideró que la distonía focal estaba relacionada con transtornos psiquiátricos. Lo único que la ciencia sabe por el momento es que la región que controla la capacidad sensorial de los dedos de los músicos presenta alteraciones y si lo normal es que el movimiento de cada dedo disponga de una región propia, en la enfermedad del músico parecen haberse fundido unas con otras. Durante mucho tiempo, se han aplicado diferentes técnicas para intentar paliar esta insubordinación de determinadas partes el cuerpo aunque sin demasiado éxito; desde los masajes fisioterapéuticos y la acupuntura hasta la inyección de diversos fármacos. No obstante, desde hace una década investigadores de la Universidad de Konstanz, en Alemania, y del Instituto de Fisiología y Medicina del Arte-Terrassa, buscan nuevas alternativas y han hallado que es posible reprogramar el cerebro distónico, volver a entrenar la mano y revertir el proceso. El cerebro debe aprender a olvidar patrones de movimiento erróneos y a reemplazarlos por otros nuevos. Para ello, diseñaron programas de trabajo en los que hacían practicar a los músicos limitando intencionadamente el trabajo de algunos dedos. De esta manera, los músicos debían formatear el disco duro en el que tenían almacenados todos los procesos de interpretación que se ‘colgaban’ al tocar, e incorporar otros patrones nuevos. La Medicina del Arte La medicina del arte es un concepto bastante reciente. De hecho, en todo el mundo existen escasos centros especiazalidos en este tipo de lesiones. El Instituto de Fisiología y Medicina del Arte-Terrassa es uno de ellos; en él diagnostican y tratan a músicos, bailarines, artistas de circo e incluso a colectivos que no tienen que ver con el arte pero que no encuentran solución a sus problemas en la medicina tradicional, como es el caso de los diseñadores gráficos, qeu acaban con problemas de muñeca debido al uso intensivo del ratón del ordenador. Vinculado a este Instituto se creó la Fundación Ciencia y Arte, una entidad sin ánimo de lucro que tiene como objetivo la investigación y la dilvulgación de estas lesiones. A parte del barcelonés, tan sólo en Nueva York, Alemania, y desde hace algún tiempo en Japón hay institutos similares, en los que médicos, fisioterapeutas y pedagogos musicales tratan no sólo a músicos, sino también a cantantes, actores, bailarines y artistas en general. Y es que la música provoca placer pero también puede causar dolor y enfermedad
Gracias cristina

jueves, 2 de abril de 2015

G.Donizetti Studio Primo per clarinetto solo / Clarinette : Mei-Hung LU

Pasad unos minutos agradables escuchando a Mei- Hung LU, hace una buena versión del Studio Primo de Donizetti, que si no recuerdo mal, todavía no la he publicado. Feliz día a tod@s