Es un verdadero espéctaculo, ver y escuchar a Martin Fröts. Aparte de ser un verdadero genio como clarinetista, se permite crear estos espectáculos.Qué difícil tiene que ser tocar, y "consumir combustible" (aire) bailando, pero claro, ya comenté en una entrada anterior que a Martin Fröst no se le resiste con el clarinete en la mano,prácticamanete nada. Espero que lo disfrutéis...Feliz fin de semana.
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